Mucho se ha hablado de los beneficios del team building para crear sinergias entre los empleados de una empresa, potenciar su motivación y crear lo que algunos han llamado cultura corporativa.
Sin embargo, para otros es solo una moda pasajera. ¿Qué hay de cierto en realidad en este movimiento que busca la implicación de los trabajadores?
En realidad, es poner a los equipos en situaciones fuera del contexto laboral, lo que hace que bajen la guardia y puedan ver las verdaderas aptitudes y caracter de sus compañeros.
“Esto no sólo mejora la satisfacción y la motivación en el trabajo, sino que también mejora las habilidades para la resolución de problemas y la toma de decisiones porque se ven perfiles que, de otra forma, en un organigrama pueden pasar desapercibidos” explican desde Muskan Eventos.
Bien a través de actividades en las sedes en forma de talleres de malabares, sesiones de risoterapia, biodanza, yoga o pilates o bien desplazando al personal a un entorno diferente al que están acostumbrados para ponerse a prueba con gymkhanas, deportes multiaventura, jornadas de paintball, rocódromo o bowling, hay una serie de aspectos que mejoran de forma demostrable.
Uno de los principales aspectos que se potencia es la mejora de la comunicación y la colaboración entre los miembros del equipo. Cuando los empleados tienen la oportunidad de interactuar fuera de su entorno laboral habitual, pueden construir relaciones más sólidas y desarrollar una mejor comprensión de las fortalezas y debilidades de cada uno. Esto, a su vez, conduce a una comunicación y colaboración más efectiva en el trabajo porque se acaba extrapolando.
Además, este tipo de planes consigue aumentar la motivación y la satisfacción laboral al romper con la monotonía de su rutina diaria. El hecho de conocerse fuera de los cargos, permite ganar confianza, lealtad e incluso alianzas de las que luego se beneficia la compañía en el trabajo diario.
Finalmente, la formación de equipos mejora las habilidades de resolución de problemas y toma de decisiones al promover la creatividad y la innovación.
Si bien los beneficios de la formación de equipos son claros, las empresas también deben considerar cómo hacer que estas actividades sean atractivas y efectivas evitando centrarse demasiado en aspectos superficiales de eventos llamativos o salidas costosas. Estas actividades pueden resultar divertidas a corto plazo, pero no necesariamente generan beneficios a largo plazo para la empresa.
Es una recompensa de la que se acaban beneficiando todos. De ahí su verdadera importancia siempre que se ponga en manos de expertos que sepan cómo sacar partido a la inversión en team building para empresas dispuestas a dejarse llevar por sus propios trabajadores.